Con su aroma vibrante, su elegancia ligada a los valles más frescos del país y esos sabores que invitan a brindar, el Sauvignon Blanc sigue siendo un invitado infaltable en la mesa chilena.
Fresco, versátil y eternamente vigente, este vino blanco ha conquistado momentos que van desde los aperitivos más casuales hasta las celebraciones más memorables. No es casualidad que cada año, en mayo, el mundo le dedique un día entero para reconocer su lugar privilegiado en nuestras copas… y en nuestro corazón.
En 2025, más que nunca, el Sauvignon Blanc chileno tiene motivos de sobra para festejar. Sus cifras reflejan no solo una consolidación local, sino también un creciente reconocimiento internacional.
A pesar de que las exportaciones totales de vino chileno registraron una caída del 8,9% en volumen durante el primer trimestre de 2025, el Sauvignon Blanc resistió firmemente dentro del segmento de vinos con denominación de origen. De hecho, su valor aumentó un 3,1% respecto a marzo de 2024, alcanzando un precio promedio de USD 3,08 por litro, según reportes de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA). Una clara señal de que, incluso en escenarios adversos, los consumidores siguen apostando por etiquetas de calidad, frescura y autenticidad.
Si miramos hacia afuera, el entusiasmo no es menor:
- En Brasil, las exportaciones de Sauvignon Blanc embotellado subieron un impresionante 52,3% en el último año.
- En Reino Unido, el alza fue de un sólido 17,3%.
- Y en Estados Unidos, el crecimiento sostenido confirma la preferencia por un estilo vibrante y frutal que representa de manera única a los valles chilenos.
Estos números no son casualidad. Reflejan una evolución en los gustos internacionales y el reconocimiento del Sauvignon Blanc chileno como uno de los grandes exponentes de la categoría a nivel mundial.
¿Cómo sumarse a la celebración?
Este viernes 2 de mayo, Día Internacional del Sauvignon Blanc, es la oportunidad perfecta para descorchar una botella y rendir homenaje a esta variedad que ha sabido capturar la esencia de nuestra tierra.
Cada etiqueta refleja la pasión y el talento de los viñateros que han llevado al Sauvignon Blanc chileno a conquistar las mesas del mundo.
Porque celebrar el Sauvignon Blanc es también honrar el trabajo de quienes, día a día, cultivan nuestras raíces y proyectan nuestro nombre en cada copa servida con orgullo.
Salud por Chile, por la vida, y por el inconfundible Sauvignon Blanc!